2025-07-01
Nuevo Mundo – 96.1
El Real Madrid se mide a la Juventus en los octavos de final del Mundial de Clubes y, por primera vez desde que comenzó el torneo, Xabi Alonso podrá contar con Mbappé. El delantero francés no ha podido participar ni un solo minuto en los tres partidos de la fase de grupos por culpa de una gastroenteritis que le ha tenido en el dique seco desde hace dos semanas.Ya recuperado, se espera que la ´tortuga´ por fin pueda disfrutar de sus primeros minutos a las órdenes del nuevo entrenador del club. Justo dos días después de la llegada del Madrid a Estados Unidos, no pudo entrenar por culpa del virus gastrointestinal que contrajo.Xabi Alonso tuvo que apostar por Gonzalo en su lugar. El canterano se ha convertido, por derecho propio, en una de las sensaciones del torneo y en un jugador a tener en cuenta de cara a futuro. El primer duelo de los blancos ante el Al Hilal acabó en tablas y con muchas dudas en el inicio de un nuevo ciclo que aún mostraba las inercias negativas del anterior.Gonzalo, el sustituto más eficaz de MbappéEl canterano está aprovechando al máximo los minutos y la confianza que el tolosarra está depositando en él. De hecho, en la segunda jornada en el duelo ante Pachuca, Xabi Alonso volvió a apostar por él desde el inicio y el que se quedó en el banquillo fue Rodrygo. En ese partido Mbappé tampoco pudo estar por no estar recuperado aún de su enfermedad.Xabi Alonso dijo que esperaría a Mbappé hasta el último momento en cada uno de los dos partidos siguientes, pero el galo no saltó al campo, ni entró en la lista, para las citas ganadas contra el Pachuca en Charlotte (3-1) y contra el Salzburgo en Philadelphia (3-0), partido en el que Gonzalo volvió a marcar.El francés, que marcó 43 goles en su primera temporada de blanco, regresará con toda probabilidad a la lista para el partido contra el Juventus, donde el Madrid arranca una fase de eliminación directa que debe llevarle a la final del 13 de julio en Nueva Jersey.Mbappé ha estado trabajando con el grupo y podría volver al once contra el Juventus, aunque ante su ausencia el Madrid encontró a un sustituto que dio la cara en Gonzalo García.El Madrid recuperó además la versión más competitiva de Vinicius Junior, que firmó un gol y dio una espectacular asistencia de tacón en la victoria 3-0 contra el Salzburgo.Una Juventus en horas bajasEnfrente, una Juventus en horas bajas, que en los últimos años ha estado muy lejos de la elite en el fútbol italiano y que ha luchado hasta el final para conseguir un billete para la próxima Liga de Campeones.Tras despedir a Thiago Motta, el Juventus apostó por el croata Igor Tudor en el banquillo, quien consiguió el objetivo mínimo en la Serie A y quien se ganó una oportunidad para quedarse en el banquillo en este Mundial de Clubes.Ya no es el Juventus de Massimiliano Allegri, un equipo que ganó cinco Serie A y cuatro Copas Italia, además de disputar dos finales de la Liga de Campeones en los cinco años de la gestión del italiano.Una de esas finales la disputó precisamente contra el Real Madrid en Cardiff, cuando Cristiano Ronaldo entregó al club blanco la segunda de las tres Ligas de Campeones consecutivas ganadas bajo la gestión de Zinedine Zidane.
El Real Madrid se mide a la Juventus en los octavos de final del Mundial de Clubes y, por primera vez desde que comenzó el torneo, Xabi Alonso podrá contar con Mbappé. El delantero francés no ha podido participar ni un solo minuto en los tres partidos de la fase de grupos por culpa de una gastroenteritis que le ha tenido en el dique seco desde hace dos semanas.
Ya recuperado, se espera que la ´tortuga´ por fin pueda disfrutar de sus primeros minutos a las órdenes del nuevo entrenador del club. Justo dos días después de la llegada del Madrid a Estados Unidos, no pudo entrenar por culpa del virus gastrointestinal que contrajo.
Xabi Alonso tuvo que apostar por Gonzalo en su lugar. El canterano se ha convertido, por derecho propio, en una de las sensaciones del torneo y en un jugador a tener en cuenta de cara a futuro. El primer duelo de los blancos ante el Al Hilal acabó en tablas y con muchas dudas en el inicio de un nuevo ciclo que aún mostraba las inercias negativas del anterior.
El canterano está aprovechando al máximo los minutos y la confianza que el tolosarra está depositando en él. De hecho, en la segunda jornada en el duelo ante Pachuca, Xabi Alonso volvió a apostar por él desde el inicio y el que se quedó en el banquillo fue Rodrygo. En ese partido Mbappé tampoco pudo estar por no estar recuperado aún de su enfermedad.
Xabi Alonso dijo que esperaría a Mbappé hasta el último momento en cada uno de los dos partidos siguientes, pero el galo no saltó al campo, ni entró en la lista, para las citas ganadas contra el Pachuca en Charlotte (3-1) y contra el Salzburgo en Philadelphia (3-0), partido en el que Gonzalo volvió a marcar.
El francés, que marcó 43 goles en su primera temporada de blanco, regresará con toda probabilidad a la lista para el partido contra el Juventus, donde el Madrid arranca una fase de eliminación directa que debe llevarle a la final del 13 de julio en Nueva Jersey.
Mbappé ha estado trabajando con el grupo y podría volver al once contra el Juventus, aunque ante su ausencia el Madrid encontró a un sustituto que dio la cara en Gonzalo García.
El Madrid recuperó además la versión más competitiva de Vinicius Junior, que firmó un gol y dio una espectacular asistencia de tacón en la victoria 3-0 contra el Salzburgo.
Enfrente, una Juventus en horas bajas, que en los últimos años ha estado muy lejos de la elite en el fútbol italiano y que ha luchado hasta el final para conseguir un billete para la próxima Liga de Campeones.
Tras despedir a Thiago Motta, el Juventus apostó por el croata Igor Tudor en el banquillo, quien consiguió el objetivo mínimo en la Serie A y quien se ganó una oportunidad para quedarse en el banquillo en este Mundial de Clubes.
Ya no es el Juventus de Massimiliano Allegri, un equipo que ganó cinco Serie A y cuatro Copas Italia, además de disputar dos finales de la Liga de Campeones en los cinco años de la gestión del italiano.
Una de esas finales la disputó precisamente contra el Real Madrid en Cardiff, cuando Cristiano Ronaldo entregó al club blanco la segunda de las tres Ligas de Campeones consecutivas ganadas bajo la gestión de Zinedine Zidane.
