2024-12-05
Nuevo Mundo – 96.1
El jugador de la Fiorentina Edoardo Bove, que el domingo sufrió un colapso en partido contra el Inter de Milán, ha abandonado la unidad de cuidados intensivos del Hospital de Careggi en Florencia al mejorar su estado, informa el club italiano. Se especula con la posibilidad de que le implanten un desfibrilador subcutáneo, en cuyo caso no podría seguir jugando en Italia.La mejoría la confirmó el director general de la Fiorentina, Alessandro Ferrari, quien aseguró, después de la eliminación del equipo ´viola´ en octavos de final de la Coppa, que el futbolista, de 22 años, «está en buenas manos y se encuentra bien». Tenemos que ser pacientes y respetarle», expresó en declaraciones que recoge Europa Press.»Ha salido de cuidados intensivos, concretamente, se ha trasladado a un departamento llamado UTIC, que es de menor nivel de sensibilidad», avanzó el directivo en declaraciones a Mediaset tras el encuentro de Copa italiana.Bove se desmayó en pleno partido este domingo contra el Inter de Milán provocando escenas de pánico en el Stadio Artemio Franchi (Florencia), aunque poco después se fue filtrando el optimismo sobre su recuperación, vigilado en el Hospital de Careggi «bajo sedación farmacológica».Tras los sucedido, las noticias fueron positivas sobre el estado de salud del joven jugador italiano. A los 20 minutos de partido, Bove se fue al suelo después de unos pasos en falso en clara señal de alerta para el resto de jugadores; al parecer había sufrido un choque fortuito con el neerlandés Dumfries. Muy cerca de la banda, la asistencia tardó apenas segundos en saltar a atender al jugador, rodeado por compañeros y rivales en pánico.Bove fue reanimado en el campo y trasladado en ambulancia al centro hospitalario más importante de la ciudad, mientras que el partido, de la jornada 14 de la Serie A italiana y con 0-0, quedó suspendido. El futbolista nacido en Roma respondió rápido a los cuidados de los médicos en el departamento de cardiología y pronto recuperó el sentido y respiraba de manera independiente.El desfibrilador, otro caso como el de ErikssenLa normativa médico deportiva italiana, recogida en los «Protocolos cardiológicos para la evaluación de la aptitud para el deporte de competición», no prevé que un futbolista con un desfribilador subcutáneo pueda jugar en la Serie A, informa Efe.Aunque el club no actualizado desde el pasado lunes el estado de salud de Bove, el diario ´La Reppublica´ informa este jueves de que el futbolista habría ya dado el visto bueno al implante y que, por tanto, no podría continuar con su carrera deportiva en Italia. La operación para implantárselo, según el rotativo, se podría llevar a cabo incluso este viernes, pues el jugador ya tiene el ritmo cardíaco controlado y solo necesita seguimiento en ese sentido.Existe un precedente en un caso muy parecido. Hace 3 años, el danés Christian Eriksen no pudo continuar con el Inter de Milán tras sufrir un episodio similar en la Euro 2020 y serle implantado este dispositivo que corrige mediante pequeñas descargas eléctricas cualquier posible arritmia.No es así de rígida la norma en otros campeonatos como la Premier League inglesa, en la que actualmente juega el centrocampista danés, en el Manchester United.
El jugador de la Fiorentina Edoardo Bove, que el domingo sufrió un colapso en partido contra el Inter de Milán, ha abandonado la unidad de cuidados intensivos del Hospital de Careggi en Florencia al mejorar su estado, informa el club italiano. Se especula con la posibilidad de que le implanten un desfibrilador subcutáneo, en cuyo caso no podría seguir jugando en Italia.
La mejoría la confirmó el director general de la Fiorentina, Alessandro Ferrari, quien aseguró, después de la eliminación del equipo ´viola´ en octavos de final de la Coppa, que el futbolista, de 22 años, «está en buenas manos y se encuentra bien». Tenemos que ser pacientes y respetarle», expresó en declaraciones que recoge Europa Press.
«Ha salido de cuidados intensivos, concretamente, se ha trasladado a un departamento llamado UTIC, que es de menor nivel de sensibilidad», avanzó el directivo en declaraciones a Mediaset tras el encuentro de Copa italiana.
Bove se desmayó en pleno partido este domingo contra el Inter de Milán provocando escenas de pánico en el Stadio Artemio Franchi (Florencia), aunque poco después se fue filtrando el optimismo sobre su recuperación, vigilado en el Hospital de Careggi «bajo sedación farmacológica».
Tras los sucedido, las noticias fueron positivas sobre el estado de salud del joven jugador italiano. A los 20 minutos de partido, Bove se fue al suelo después de unos pasos en falso en clara señal de alerta para el resto de jugadores; al parecer había sufrido un choque fortuito con el neerlandés Dumfries. Muy cerca de la banda, la asistencia tardó apenas segundos en saltar a atender al jugador, rodeado por compañeros y rivales en pánico.
Bove fue reanimado en el campo y trasladado en ambulancia al centro hospitalario más importante de la ciudad, mientras que el partido, de la jornada 14 de la Serie A italiana y con 0-0, quedó suspendido. El futbolista nacido en Roma respondió rápido a los cuidados de los médicos en el departamento de cardiología y pronto recuperó el sentido y respiraba de manera independiente.
El desfibrilador, otro caso como el de Erikssen
La normativa médico deportiva italiana, recogida en los «Protocolos cardiológicos para la evaluación de la aptitud para el deporte de competición», no prevé que un futbolista con un desfribilador subcutáneo pueda jugar en la Serie A, informa Efe.
Aunque el club no actualizado desde el pasado lunes el estado de salud de Bove, el diario ´La Reppublica´ informa este jueves de que el futbolista habría ya dado el visto bueno al implante y que, por tanto, no podría continuar con su carrera deportiva en Italia. La operación para implantárselo, según el rotativo, se podría llevar a cabo incluso este viernes, pues el jugador ya tiene el ritmo cardíaco controlado y solo necesita seguimiento en ese sentido.
Existe un precedente en un caso muy parecido. Hace 3 años, el danés Christian Eriksen no pudo continuar con el Inter de Milán tras sufrir un episodio similar en la Euro 2020 y serle implantado este dispositivo que corrige mediante pequeñas descargas eléctricas cualquier posible arritmia.
No es así de rígida la norma en otros campeonatos como la Premier League inglesa, en la que actualmente juega el centrocampista danés, en el Manchester United.
