2024-11-13
Nuevo Mundo – 96.1
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha telefoneado este martes a su homólogo estadounidense y reciente ganador de las elecciones en Estados Unidos hace una semana, Donald Trump, para felicitarle por los resultados obtenidos.En un tuit publicado en X, el jefe del Ejecutivo español ha asegurado que España y EE.UU. son «socios, amigos y aliados estratégicos» que mantienen «unas estrechas relaciones bilaterales».Además, Sánchez ha asegurado que tras la victoria del republicano, Estados Unidos y Europa «deben continuar reforzando la relación transatlántica» y que seguirán «trabajando juntos para hacer frente a desafíos globales».La conversación entre ambos ha sido en inglés y ha durado «aproximadamente un cuarto de hora» y ha sido «positiva y en tono cordial», según fuentes del Gobierno, que señalan también que Trump se ha mostrado agradecido por la llamada. Además, según estas mismas fuentes, ambos mandatarios han hablado de relaciones bilaterales y transatlánticas en una conversación que se ha dado gracias a que la Moncloa había contactado previamente con el equipo del republicano para que se pudiese dar.Sánchez, que se encuentra participando ahora mismo en Bakú en la Cumbre del Clima, ya felicitó en las redes sociales a Trump tras conocerse su victoria en las urnas. En esa felicitación, el pasado 6 de noviembre, ya expresó su intención de ahondar en las relaciones bilaterales estratégicas y en una sólida asociación transatlántica.Sánchez ya había felicitado a Trump por redes socialesEse 6 de noviembre, el presidente del Gobierno mandó un escueto mensaje a Trump a través de X. «Felicitaciones Donald Trump por su victoria y su elección como 47º Presidente de los Estados Unidos. Trabajaremos en nuestras relaciones bilaterales estratégicas y en una fuerte asociación transatlántica», escribió Sánchez. La última vez que los dos coincidieron fue en la cumbre del G20 en Osaka en 2019, donde ambos solo llegaron a intercambiar un rápido saludo, tras lo que Trump le indicó al presidente español su sitio para sentarse, mientras Sánchez se reía.Aunque el Ejecutivo apostó en campaña y mostró su apoyo públicamente por su rival demócrata Kamala Harris, desde que se conoció la victoria de Trump, el Gobierno español ha optado por la cautela y por apostar por «fortalecer» las relaciones entre ambos países.La semana pasada el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, insistió en recalcar la «alianza» con EE.UU. tras la victoria de Trump. “Estados Unidos es un aliado natural de Europa, juntos somos capaces de hacer frente a crisis muy difíciles. Cuando trabajamos juntos, la prosperidad y seguridad de nuestros ciudadanos se profundiza y en eso vamos a trabajar”, aseguró Albares ante los medios.Aunque Sánchez insiste en que trabajarán «juntos para hacer frente a los desafíos globales», tanto España como la UE inician ahora una nueva relación con Estados Unidos y con temas clave que pueden levantar ampollas entre ambos países como la guerra en Ucrania, la invasión de Israel en Palestina y el conflicto en Oriente Próximo, o los aranceles a productos europeos. Todo ello se empezará a desenredar a partir del próximo 20 de enero de 2025, cuando el republicano tome posesión y eche a andar.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha telefoneado este martes a su homólogo estadounidense y reciente ganador de las elecciones en Estados Unidos hace una semana, Donald Trump, para felicitarle por los resultados obtenidos.
En un tuit publicado en X, el jefe del Ejecutivo español ha asegurado que España y EE.UU. son «socios, amigos y aliados estratégicos» que mantienen «unas estrechas relaciones bilaterales».
Además, Sánchez ha asegurado que tras la victoria del republicano, Estados Unidos y Europa «deben continuar reforzando la relación transatlántica» y que seguirán «trabajando juntos para hacer frente a desafíos globales».
La conversación entre ambos ha sido en inglés y ha durado «aproximadamente un cuarto de hora» y ha sido «positiva y en tono cordial», según fuentes del Gobierno, que señalan también que Trump se ha mostrado agradecido por la llamada. Además, según estas mismas fuentes, ambos mandatarios han hablado de relaciones bilaterales y transatlánticas en una conversación que se ha dado gracias a que la Moncloa había contactado previamente con el equipo del republicano para que se pudiese dar.
Sánchez, que se encuentra participando ahora mismo en Bakú en la Cumbre del Clima, ya felicitó en las redes sociales a Trump tras conocerse su victoria en las urnas. En esa felicitación, el pasado 6 de noviembre, ya expresó su intención de ahondar en las relaciones bilaterales estratégicas y en una sólida asociación transatlántica.
Ese 6 de noviembre, el presidente del Gobierno mandó un escueto mensaje a Trump a través de X. «Felicitaciones Donald Trump por su victoria y su elección como 47º Presidente de los Estados Unidos. Trabajaremos en nuestras relaciones bilaterales estratégicas y en una fuerte asociación transatlántica», escribió Sánchez. La última vez que los dos coincidieron fue en la cumbre del G20 en Osaka en 2019, donde ambos solo llegaron a intercambiar un rápido saludo, tras lo que Trump le indicó al presidente español su sitio para sentarse, mientras Sánchez se reía.
Aunque el Ejecutivo apostó en campaña y mostró su apoyo públicamente por su rival demócrata Kamala Harris, desde que se conoció la victoria de Trump, el Gobierno español ha optado por la cautela y por apostar por «fortalecer» las relaciones entre ambos países.
La semana pasada el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, insistió en recalcar la «alianza» con EE.UU. tras la victoria de Trump. “Estados Unidos es un aliado natural de Europa, juntos somos capaces de hacer frente a crisis muy difíciles. Cuando trabajamos juntos, la prosperidad y seguridad de nuestros ciudadanos se profundiza y en eso vamos a trabajar”, aseguró Albares ante los medios.
Aunque Sánchez insiste en que trabajarán «juntos para hacer frente a los desafíos globales», tanto España como la UE inician ahora una nueva relación con Estados Unidos y con temas clave que pueden levantar ampollas entre ambos países como la guerra en Ucrania, la invasión de Israel en Palestina y el conflicto en Oriente Próximo, o los aranceles a productos europeos. Todo ello se empezará a desenredar a partir del próximo 20 de enero de 2025, cuando el republicano tome posesión y eche a andar.
