2024-05-08
Nuevo Mundo – 96.1
El Real Madrid es el segundo finalista de la Champions League. El conjunto español ha levantado un partido que tenía en contra para terminar ganando por 2-1 al Bayern Múnich. Joselu Mato, delantero de circunstancias esta temporada, cedido por el Espanyol, que ha salido desde el banquillo, ha sido el héroe con un doblete, dando la vuelta al gol de Alphonso Davies.Empezando por el final, el encuentro tuvo su polémica con un tanto anulado a De Ligt por fuera de juego previo de Müller. El problema vino porque fue pitado antes de que el balón llegara al central neerlandés y con los futbolistas del Madrid parados. Todo el Bayern lo protestó, pero no subió al marcador. Se estaba jugando el minuto 115.Para explicar por qué se llegó tan lejos hay que pasar de largo por la primera parte, sin goles. De largo pero sin dejar de mencionar una doble ocasión de Vinicius y Rodrygo, con disparo al palo del primero y detenido por Neuer al segundo. El portero alemán fue el mejor de su equipo, junto a Davies, pero en uno de los goles tuvo un papel fundamental a su pesar.El conjunto que dirige Carlo Ancelotti salió lanzado, con el Bernabéu enardecido. Pero el Bayern supo aguantar. Casi como en Múnich pero con papeles cambiados. La mala noticia para su homólogo Thomas Tuchel fue la lesión de Serge Gnabry, que forzó para llegar y no pudo ni acabar la primera parte. En la segunda la tónica parecía similar, pero con un Vinicius desatado poniendo en apuros a Kimmich y De Ligt por sus internadas desde la izquierda.La noche soñada para JoseluCuando mejor estaba el Madrid llegó el gol de Davies. La jugada que buscaba Vinicius la encontró el canadiense, recortando hacia dentro y disparando a la escuadra (minuto 68). Ancelotti introdujo los cambios, empezando por el consabido de Modric por Kroos y Camavinga por Tchouameni. Pero el clave estuvo en el posterior de Joselu por Rodrygo. El delantero formado en la cantera del conjunto blanco, madridista confeso y que con 30 años cumplidos todavía esperaba su gran noche.Un disparo de Vinicius iba aparentemente sin peligro a las manos de Neuer, pero incomprensiblemente el meta alemán falló en el blocaje y llegó Joselu para no perdonar (minuto 88). Todavía le quedaba una más al internacional español, cuando en un saque de esquina prolongado remató a la red un remate de Rüdiger. Primero fue anulado, pero la revisión del VAR confirmó lo que se vio en los televisores: posición correcta del alemán en el pase de Brahim y de Joselu en el segundo pase (minuto 92).La prórroga que parecía iba a llegar se evitó, pero el tiempo de prolongación casi fue una prórroga, merecida por la grandeza del rival. Aunque la jugada del fuera de juego y el comprensible enfado del Bayern lo deslució un poco. Eso no empañó la fiesta que siguió al pitido final en el Bernabéu. El Madrid buscan una más y será por primera vez en su historia en Wembley.
El Real Madrid es el segundo finalista de la Champions League. El conjunto español ha levantado un partido que tenía en contra para terminar ganando por 2-1 al Bayern Múnich. Joselu Mato, delantero de circunstancias esta temporada, cedido por el Espanyol, que ha salido desde el banquillo, ha sido el héroe con un doblete, dando la vuelta al gol de Alphonso Davies.
Empezando por el final, el encuentro tuvo su polémica con un tanto anulado a De Ligt por fuera de juego previo de Müller. El problema vino porque fue pitado antes de que el balón llegara al central neerlandés y con los futbolistas del Madrid parados. Todo el Bayern lo protestó, pero no subió al marcador. Se estaba jugando el minuto 115.
Para explicar por qué se llegó tan lejos hay que pasar de largo por la primera parte, sin goles. De largo pero sin dejar de mencionar una doble ocasión de Vinicius y Rodrygo, con disparo al palo del primero y detenido por Neuer al segundo. El portero alemán fue el mejor de su equipo, junto a Davies, pero en uno de los goles tuvo un papel fundamental a su pesar.
El conjunto que dirige Carlo Ancelotti salió lanzado, con el Bernabéu enardecido. Pero el Bayern supo aguantar. Casi como en Múnich pero con papeles cambiados. La mala noticia para su homólogo Thomas Tuchel fue la lesión de Serge Gnabry, que forzó para llegar y no pudo ni acabar la primera parte. En la segunda la tónica parecía similar, pero con un Vinicius desatado poniendo en apuros a Kimmich y De Ligt por sus internadas desde la izquierda.
La noche soñada para Joselu
Cuando mejor estaba el Madrid llegó el gol de Davies. La jugada que buscaba Vinicius la encontró el canadiense, recortando hacia dentro y disparando a la escuadra (minuto 68). Ancelotti introdujo los cambios, empezando por el consabido de Modric por Kroos y Camavinga por Tchouameni. Pero el clave estuvo en el posterior de Joselu por Rodrygo. El delantero formado en la cantera del conjunto blanco, madridista confeso y que con 30 años cumplidos todavía esperaba su gran noche.
Un disparo de Vinicius iba aparentemente sin peligro a las manos de Neuer, pero incomprensiblemente el meta alemán falló en el blocaje y llegó Joselu para no perdonar (minuto 88). Todavía le quedaba una más al internacional español, cuando en un saque de esquina prolongado remató a la red un remate de Rüdiger. Primero fue anulado, pero la revisión del VAR confirmó lo que se vio en los televisores: posición correcta del alemán en el pase de Brahim y de Joselu en el segundo pase (minuto 92).
La prórroga que parecía iba a llegar se evitó, pero el tiempo de prolongación casi fue una prórroga, merecida por la grandeza del rival. Aunque la jugada del fuera de juego y el comprensible enfado del Bayern lo deslució un poco. Eso no empañó la fiesta que siguió al pitido final en el Bernabéu. El Madrid buscan una más y será por primera vez en su historia en Wembley.
