2023-03-12
Con una película independiente, Todo a la vez en todas partes, como gran favorita, Los Ángeles y su Dolby Theatre acogen la gala de los 95 premios Oscar. Una alfombra roja coloreada esta vez de una tonalidad champán abre la gran noche de Hollywood con un pronóstico incierto en muchas de las categorías principales salvo la de mejor película (a partir de las 22.30 h. alfombra roja en vivo en RTVE.es).La vertiginosa película de Daniel Scheinert y Daniel Kwan sobre una inmigrante china que recorre todas sus vidas posibles para salvar al mundo se estrenó hace un año en EE.UU., pero ha completado un círculo virtuoso en el que ha arrasado en la temporada de premios y parte por delante de un variado espectro de diez películas entre las que caben blockbusters (Avatar 2: el sentido del agua), el emotivo autobiopic de Spielberg (Los Fabelman), o la última Palma de Oro (El triángulo de la tristeza)¿Tiene Hollywood mucho que celebrar en su fiesta anual? La respuesta rápida es sí. 2022 ha sido el año del regreso a las salas tras la pandemia con dos taquillazos absolutos como Avatar 2: el sentido del agua (tercera película más taquillera de la historia) y Top Gun: Maverick. El futuro por supuesto es más incierto, pero vale la pena celebrar un poco de presente.Los premios de mejor actriz (entre Cate Blanchett y Michelle Yeoh) y mejor actor (entre Austin Butler y Brendan Fraser) están en el aire, pero no son las únicas incógnitas. El sorprendente éxito del drama antibélico alemán Sin novedad en el frente se disputa reinar en las categorías técnicas con Elvis, el vibrante biopic del rey del rock de Baz Luhrmann.Oscar 2023: Incógnitas, favoritos y sorpresas de una gala abiertaESTEBAN RAMÓNLa actriz cubana-española Ana de Armas, nominada por poseer a Marilyn Monroe en Blonde, es una de los variados focos de atención de una gala que es un inmenso cajón de sastre de celebridades. Desde presentadores de premios como Florence Pugh, Hugh Grant, Nicole Kidman, Zoe Saldaña, Pedro Pascal, Harrison Ford, Cara Delevingne o Antonio Banderas, hasta un premio Nobel de Literatura como Kazuo Ishiguro (nominado a mejor guion adaptado por Living).Una gala en busca de la audiencia perdidaEn 2014, 43 millones de estadounidenses vieron la victoria de 12 años de esclavitud; en 2020, justo unas semanas antes del confinamiento, el Oscar para Parásitos solo tuvo 23 millones de audiencia. Y en 2021 y 2022 fueron 10,4 y 15,3 millones respectivamente. La caída es tan fuerte que es difícil analizar si el problema es el cine, la televisión o la resta de ambos.Jimmy Kimmel, un azote amable de Hollywood, presenta por tercera vez una ceremonia que se repliega sobre sí misma. Atrás quedan las galas sin presentadores, la exclusión de algunos premios de la retransmisión como el año pasado, o los vanos intentos de atraer público como el Oscar a la película más popular. Experimentos, con gaseosa -piensa la Academia-, regreso a la fórmula clásica y a cruzar los dedos. Según la revista Variety, incluso se ha rechazado, por segundo año, que el presidente ucraniano Volodímir Zelenski entrase con un mensaje en directo.Cuatro de las cinco canciones nominadas al Oscar tendrán su actuación en la gala. Rihanna interpretará “Lift me up”, de Black Panther: Wakanda Forever; la sensación “Naatu Naatu”, de la película india RRR contará con Rahul Sipligunj y Kaala Bhairava en escena; David Byrne, Son Lux y la actriz Stephanie Hsu defenderán “This is a life”, de Todo a la vez en todas partes; y Sofia Carson pondrá voz a “Aplause”, de la eterna nominada Diane Warren. Solo Lady Gaga, que está grabando la nueva película de Joker, ha declinado la invitación. Además, Lenny Kravitz es el encargado del momento musical de ‘in memoriam’.Para los Oscar ya sería un éxito organizativo no repetir el bochorno de la no expulsión de la gala de Will Smith tras su bofetón a Chris Rock (la Academia ha informado de que existe un nuevo equipo anticrisis) o, sencillamente, no confundir el sobre de mejor película como sucedió en 2017, precisamente el primer año de Kimmel. El presentador bromeaba sobre su propio protocolo en caso de bofetada. “¿Si alguien sube al escenario y me abofetea? Bueno, los mido y, si soy más grande que ellos, les doy una paliza en televisión. Y, si es ‘The Rock’, corro”. Veremos.
Con una película independiente, Todo a la vez en todas partes, como gran favorita, Los Ángeles y su Dolby Theatre acogen la gala de los 95 premios Oscar. Una alfombra roja coloreada esta vez de una tonalidad champán abre la gran noche de Hollywood con un pronóstico incierto en muchas de las categorías principales salvo la de mejor película (a partir de las 22.30 h. alfombra roja en vivo en RTVE.es).
La vertiginosa película de Daniel Scheinert y Daniel Kwan sobre una inmigrante china que recorre todas sus vidas posibles para salvar al mundo se estrenó hace un año en EE.UU., pero ha completado un círculo virtuoso en el que ha arrasado en la temporada de premios y parte por delante de un variado espectro de diez películas entre las que caben blockbusters (Avatar 2: el sentido del agua), el emotivo autobiopic de Spielberg (Los Fabelman), o la última Palma de Oro (El triángulo de la tristeza)
¿Tiene Hollywood mucho que celebrar en su fiesta anual? La respuesta rápida es sí. 2022 ha sido el año del regreso a las salas tras la pandemia con dos taquillazos absolutos como Avatar 2: el sentido del agua (tercera película más taquillera de la historia) y Top Gun: Maverick. El futuro por supuesto es más incierto, pero vale la pena celebrar un poco de presente.
Los premios de mejor actriz (entre Cate Blanchett y Michelle Yeoh) y mejor actor (entre Austin Butler y Brendan Fraser) están en el aire, pero no son las únicas incógnitas. El sorprendente éxito del drama antibélico alemán Sin novedad en el frente se disputa reinar en las categorías técnicas con Elvis, el vibrante biopic del rey del rock de Baz Luhrmann.
Oscar 2023: Incógnitas, favoritos y sorpresas de una gala abiertaESTEBAN RAMÓN
La actriz cubana-española Ana de Armas, nominada por poseer a Marilyn Monroe en Blonde, es una de los variados focos de atención de una gala que es un inmenso cajón de sastre de celebridades. Desde presentadores de premios como Florence Pugh, Hugh Grant, Nicole Kidman, Zoe Saldaña, Pedro Pascal, Harrison Ford, Cara Delevingne o Antonio Banderas, hasta un premio Nobel de Literatura como Kazuo Ishiguro (nominado a mejor guion adaptado por Living).
Una gala en busca de la audiencia perdida
En 2014, 43 millones de estadounidenses vieron la victoria de 12 años de esclavitud; en 2020, justo unas semanas antes del confinamiento, el Oscar para Parásitos solo tuvo 23 millones de audiencia. Y en 2021 y 2022 fueron 10,4 y 15,3 millones respectivamente. La caída es tan fuerte que es difícil analizar si el problema es el cine, la televisión o la resta de ambos.
Jimmy Kimmel, un azote amable de Hollywood, presenta por tercera vez una ceremonia que se repliega sobre sí misma. Atrás quedan las galas sin presentadores, la exclusión de algunos premios de la retransmisión como el año pasado, o los vanos intentos de atraer público como el Oscar a la película más popular. Experimentos, con gaseosa -piensa la Academia-, regreso a la fórmula clásica y a cruzar los dedos. Según la revista Variety, incluso se ha rechazado, por segundo año, que el presidente ucraniano Volodímir Zelenski entrase con un mensaje en directo.
Cuatro de las cinco canciones nominadas al Oscar tendrán su actuación en la gala. Rihanna interpretará “Lift me up”, de Black Panther: Wakanda Forever; la sensación “Naatu Naatu”, de la película india RRR contará con Rahul Sipligunj y Kaala Bhairava en escena; David Byrne, Son Lux y la actriz Stephanie Hsu defenderán “This is a life”, de Todo a la vez en todas partes; y Sofia Carson pondrá voz a “Aplause”, de la eterna nominada Diane Warren. Solo Lady Gaga, que está grabando la nueva película de Joker, ha declinado la invitación. Además, Lenny Kravitz es el encargado del momento musical de ‘in memoriam’.
Para los Oscar ya sería un éxito organizativo no repetir el bochorno de la no expulsión de la gala de Will Smith tras su bofetón a Chris Rock (la Academia ha informado de que existe un nuevo equipo anticrisis) o, sencillamente, no confundir el sobre de mejor película como sucedió en 2017, precisamente el primer año de Kimmel. El presentador bromeaba sobre su propio protocolo en caso de bofetada. “¿Si alguien sube al escenario y me abofetea? Bueno, los mido y, si soy más grande que ellos, les doy una paliza en televisión. Y, si es ‘The Rock’, corro”. Veremos.
